- Porque vivo en una ciudad donde parece que olvidamos de dónde venimos y quiénes somos.
- Porque no me considero un ciudadano de cuarta, en el mundo, a pesar de que las embajadas de países amigos y sus funcionarios consulares insistan en convencerme de aquello.
- Porque ahora se ha puesto de moda ser "skin-head-mestizo-nacionalista", repitiendo una serie de slogans extranjeros, mientras se pone cara de asno cuando se les consulta sobre Don Pío Jaramillo Alvarado, o Don Benjamín Carrión, y sus propuestas de nación ecuatoriana.
- Porque, a pesar de ser quiteño, yo sí creo en revalorar lo local para poder integrarnos en lo nacional.
- Porque creo, también, en que hay que destruir varios mitos históricos que, cuando nos damos cuenta que no son nada más que eso, pulverizan nuestro orgullo...
- Porque creo que el regionalismo no es más que intentar ver en el otro los errores que intuyo en mí (aún mantenemos la vieja práctica de longear a otros para que no te longeen a ti)
- Porque no creo en un nacionalismo xenófobo, o racista. Creo en una nación orgullosa, porque conoce sus virtudes... y pecados.
- Tampoco creo en encerrarme en mi país. La mejor forma de conocernos es conocer a los otros (siempre les digo a mis alumnos que la mejor cosa que pueden hacer es viajar, como locos)
- En fin, porque creo que nuestro centro histórico no es Disneylandia, y que nuestra historia no debería enseñarse en pizarrones, cuando tenemos el aula más hermosa a nuestra disposición...
Dixit
No hay comentarios:
Publicar un comentario